El Banco Central Europeo (BCE) publicó la pasada semana el Manual de la Prueba de Resistencia para la Evaluación Global que realizará a la banca.
En el manual se describe detalladamente la integración (join-up en inglés) del análisis de la calidad de los activos y la prueba de resistencia. Asimismo, en el manual se presenta el proceso de control de calidad de la prueba de resistencia, que es fundamental para garantizar la solidez y la credibilidad del ejercicio.
La evaluación global constituye un examen exhaustivo de los balances y de la capacidad de resistencia de las principales entidades de crédito, previo a la asunción por el BCE de sus competencias de supervisión en noviembre. La evaluación global del BCE difiere de otras pruebas de resistencia llevadas a cabo anteriormente a escala de la Unión Europea en que incluye un análisis pormenorizado de la calidad de los activos, así como una integración (join-up) de los resultados del análisis de la calidad de los activos y de la prueba de resistencia. Esto permitirá, según el organismo supervisor, una evaluación más precisa de la situación de los balances de las entidades de crédito, así como del riesgo de crédito y de otras exposiciones que afectan a las carteras de las entidades de crédito.
Una de las novedades hechas públicas es que el BCE ajustará la necesidad de provisión de los bancos como pérdidas hasta 2016. "En caso de que los datos obtenidos en el análisis de la calidad de los activos indicasen que las provisiones de una entidad son insuficientes, se ajustará la simulación de la previsión de pérdidas de la entidad para 2014, 2015 y 2016, tanto en el contexto del escenario base como del escenario adverso", anunció el regulador. Ello incidirá también en la simulación de los beneficios y pérdidas en los escenarios de la prueba de resistencia.
Vítor Constâncio, vicepresidente del BCE, aseguró el pasado 8 de agosto que “estamos dedicando mucho tiempo y esfuerzo para que este proceso sea riguroso. La integración incluye toda la información que hemos obtenido durante el análisis de la calidad de los activos, lo que distingue a este ejercicio de los anteriores. Con la publicación de este manual, estamos demostrando asimismo nuestro compromiso con la transparencia”.
El control de calidad de la prueba de resistencia tiene como objetivo obtener resultados precisos, coherentes y creíbles, dice el BCE. Se realizarán varios controles de calidad en cooperación con las autoridades nacionales competentes. El BCE confrontará los resultados de cada entidad con los de las entidades comparables y aplicará su modelo de prueba de resistencia agregada.
De acuerdo con un principio de “cumplir o explicar”, podrá requerirse a las entidades de crédito que aporten más información, además de nuevos análisis y, si fuera necesario, que vuelvan a presentar sus previsiones para la prueba de resistencia.
La integración y, en consecuencia, el impacto del análisis de la calidad de los activos en los cálculos de la prueba de resistencia, se transmitirán a través de múltiples canales. Los resultados obtenidos de las carteras examinadas se utilizarán para determinar el punto de partida de la prueba de resistencia y, a los efectos del ejercicio, podrían comportar un ajuste del balance al cierre del ejercicio 2013.
Los resultados definitivos de la evaluación global se publicarán en la segunda quincena de octubre. La entidad monetaria asumirá a partir de noviembre la supervisión unificada directa de 128 bancos de la zona del euro, de ellos 16 españoles, pero antes va a hacer un ejercicio de evaluación que comprende la revisión de la calidad de los activos y una prueba de resistencia.
Por su parte, el test de stress de este año será el tercero que se realiza en la UE desde que estalló la crisis de deuda soberana en 2010. El test, coordinado por EBA, se realizará en 28 países de la Unión Europea.
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