Si en el artículo anterior analizábamos cómo afectaría el aumento de la esperanza de vida en España al pago de las pensiones, no es el único punto que pone en jaque el pago futuro las pensiones. Así, la intensa crisis económica y laboral que sufre España ha adelantado esos problemas que se esperaban dentro de una década.
El sistema público de pensiones español es un sistema de reparto que se financia con las contribuciones de los actuales trabajadores y empresarios, de forma que si se reduce de forma notable, como así ha sido, el número de trabajadores en activo los ingresos del sistema caen hasta ser insuficientes para hacer frente al pago de las pensiones actuales.
Afiliados vs pensionistas
En el año 2007, la Seguridad Social en el punto de mayor afiliación al sistema, llegó a los 19,4 millones de trabajadores afiliados, mientras que los pensionistas sumaban 8,3 millones, lo que se traducía en un ratio de 2,3 trabajadores por cada pensionista (Número de pensiones contributivas ). A causa de la crisis, dicha relación llegó a caer hasta 1,78 en el año 2013, y aunque en la actualidad, debido a la mejora del mercado laboral y reducción de la tasa de empleo esa relación ha mejorado hasta el 1,87 (agosto 2016), aún se encuentra lejos de alcanzar los niveles que permiten sostener el sistema público de pensiones en su definición actual.
A pesar de la mejora del mercado laboral registrada desde el año 2013, aún serían necesarios entre 1,1 y 1,3 millones de afiliados adicionales –manteniendo el número de pensiones actuales- para compensar el déficit actual de la Seguridad Social, 18.943 millones de euros.
Evolución de los afiliados a la Seguridad Social frente al número de pensionistas (2001-2016)
Fuente: Seguridad Social
Incremento de las pensiones medias de jubilación
Otro problema financiero del sistema público de pensiones, añadido al elevado ratio de paro actual, es que las pensiones de los trabajadores que se jubilan cada año son superiores a las pensiones de los pensionistas que salen del sistema. De tal forma, que aunque no aumentase el número de pensionistas en el futuro el coste de las pensiones seguiría aumentando de forma natural.
Los nuevos pensionistas del 2015 entraban en el sistema con una pensión media de 1.343 euros al mes, mientras que la pensión media de los jubilados que salieron del sistema era de 944 euros, es decir casi 400 euros menos.
Evolución de la pensión media de las nuevas altas de jubilación y de las bajas (2000-2015)
Fuente: Elaboración propia a partir de datos de la Seguridad Social
En definitiva, la intensa crisis económica y el aumento de las pensiones medias han provocado que el déficit del sistema, previsto para la próxima década, se haya adelantado al período al 2013-17, provocando que haya que haber agotado prácticamente en su totalidad el fondo de reserva de la Seguridad Social para compensar los déficits anuales.
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