Las acciones de Monte dei Paschi (MPS) caen un -9,0% en pleno proceso de ampliación de capital. MPS prolonga el plazo hasta el 21 de diciembre para que los inversores minoristas acudan a un canje de bonos por acciones.
MPS pretende captar 2.000 millones de euros mediante este procedimiento y facilitar el éxito de la ampliación de capital, por hasta 5.000 millones de euros. Entendemos que el retraso temporal hasta el 21 de diciembre aumenta la incertidumbre sobre el éxito de la operación y eleva la probabilidad de una inyección con dinero público antes de finales de año.
Si MPS no es capaz obtener fondos por 5.000 millones de euros (2.000 millones de euros en canje de bonos y 3.000 millones de euros en capital), los tenedores de deuda subordinada sufrirían pérdidas significativas, para que el Estado italiano suscriba una parte importante de la ampliación de capital conforme a la normativa europea. Entendemos que la fuerte caída de las acciones cotiza este escenario como más probable.
Dicho esto, entendemos que el impacto para el conjunto del sector bancos será limitado en base a:
(i) El importe necesario no es elevado para el conjunto del sistema y parece lógico que los inversores privados institucionales prefieran invertir en MPS a un precio más atractivo,
(ii) tras la inyección de capital se reducirá significativamente la incertidumbre sobre la banca italiana. En este sentido cabe recordar que Unicredit (-1,7%) está inverso en una ampliación de capital por 13.000 millones de euros y acumula una subida en bolsa del +16,0% desde que anunció la operación.
