Para hoy, a pesar de la batería de datos que tenemos a ambos lados del Atlántico, no se prevé, salvo sorpresas, que ninguno de ellos impulse la sesión por sí mismo.
En Europa los PMIs se esperan sin variaciones respecto a los datos anteriores y en Estados Unidos tan solo se espera que mejoren los pedidos de fábrica (+0,6%) y, en menor medida, la productividad (-1,3% frente a -2,2% anterior); el resto de datos de empleo y producción no parecen que vayan a mover mercado.
De nuevo la economía norteamericana nos mandará señales de ralentización que podrían pesar en las bolsas. Los resultados empresariales de hoy tampoco parece que vayan a impulsar las cotizaciones ya que, salvo algunas empresas americanas (Time Warner, Marathon Oil,...), el resto se consideran poco relevantes.
El resultado será un mercado errático y frágil con intención de borrar las pérdidas pero sin las referencias necesarias paran remontar. Probablemente estos días debamos prestar más atención a niveles técnicos que a datos fundamentales.