El Foro Económico Mundial (World Economic Forum, WEF, o también conocido como Foro de Davo) es una organización sin fines de lucro que anualmente reúne a los principales líderes económicos y políticos mundiales. Dada la relevancia de los asistentes, las conferencias, declaraciones y actos que allí se realizan son seguidos con gran interés por la opinión pública mundial.
La mujer en el mercado laboral
La reunión de este año tiene una particularidad muy importante, está dirigida por mujeres ya que el año pasado se decidió nombrar vicepresidentas a un grupo encabezado por la primera ministra de Noruega Erna Solberg y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Christine Lagarde. A pesar de ello, sólo el 21% de los participantes son mujeres, el nivel más alto de todas las reuniones.
No obstante, el Foro ha manifestado su preocupación por la situación laboral de la mujer y en un informe que publicó en noviembre del año pasado destacó que la brecha entre hombres y mujeres había crecido en 2017 y que de seguir la evolución actual la paridad entre ambos sexos se conseguiría en 217 años a pesar de los enormes beneficios que para las economías de muchos países supondría la incorporación plena de la mujer al mercado de trabajo.
En este sentido el Foro de Davos aboga por la incorporación de la mujer a los puestos directivos de las empresas como condición para avanzar en la igualdad.
De acuerdo con la Primera Ministra noruega la necesidad de crear una sociedad del bienestar sostenible requiere el crecimiento inclusivo "y eso significa, entre otras cosas, que tanto hombres como mujeres deben ser capaces de formar parte del mercado de trabajo en los mismos términos”.
Proteccionismo vs. multilateralidad
Los temas del Foro no se agotan en lo anterior. Si en la reunión del año pasado el gran protagonista fue el Presidente chino Xi, que defendió un comercio internacional sin restricciones lejos de tentaciones proteccionistas, en la de este año Donald Trump ha insistido en sus propuestas en sentido contrario, avalado por el apoyo que ha conseguido entre las empresas norteamericanas después de su espectacular bajada de impuestos. Frente a Donald Trump se han posicionado China y prácticamente el resto de los países más importantes del mundo. Los máximos mandatarios de India, Canadá, Francia y Alemania se han manifestado a favor del multilateralismo que defendió Xi en su momento.
Esta apuesta por el multilateralismo no supone que los líderes que la defienden no sean conscientes de los daños colaterales que ha dejado y está dejando la globalización económica que no ha sido beneficiosa para amplias capas de la población mundial, lo que ha provocado movimientos populistas y reacciones nacionalistas en muchas partes del mundo.
Macron lo ha dicho muy claro: "si no le puedes asegurar a la gente que la globalización es buena para ellos, habrá nacionalistas y extremistas que quieran deshacerse del sistema. Y ganarán. Y no pasará solo en Francia, pasará en todos los países".
Para Merkel "el proteccionismo no es la solución" a los problemas que la propia globalización ha planteado.
Tanto el Presidente Macron como la Canciller Merkel han aprovechado para confirma su decisión para emprender reformas en Europa que, probablemente, impliquen que la Unión Europea empiece a avanzar a varias velocidades con un primer pelotón más decido a estrechar vínculos y a garantizar la supervivencia del proyecto europeo.
En esta misma línea fue el discurso de Don Felipe VI, que por primera vez hablaba en el Foro de Davos "la Estrategia de Acción Exterior española apuesta por la refundación de la Unión Europea, lo que supone una transformación de largo alcance que debe hacerse paso a paso". "El consenso entre los partidos políticos españoles es que el objetivo último de esta evolución no puede ser otra cosa que una mayor unión política". “En este punto, no avanzar es retroceder".
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