El sentimiento económico alemán cae al peor nivel en más de siete años

El ZEW ha bajado en agosto a -44,1, por debajo de -24,5 del mes anterior.
Los malos datos para Alemania no frenan. Ahora, el sentimiento económico cae al peor nivel en más de siete años, según el índice ZEW de agosto publicado este martes, que apunta a un deterioro significativo en las perspectivas de la economía alemana.
En concreto, el índice de sentimiento económico, que mide las expectativas para los próximos seis meses, se situó en agosto en -44,1 frente a -24,5 del mes anterior y a las expectativas de -28,5. Mientras tanto, el sentimiento económico ZEW de la eurozona para agosto llegó a -43,6 en comparación con -21,7 esperado y -20,3 de julio.

"El indicador ZEW de sentimiento económico apunta a un deterioro significativo en las perspectivas de la economía alemana. La escalada más reciente en la disputa comercial entre EEUU y China, el riesgo de devaluaciones competitivas y la mayor probabilidad de un Brexit sin acuerdo ejercen una presión adicional sobre el ya débil crecimiento económico. Lo más probable es que esto ejerza más presión sobre el desarrollo de las exportaciones alemanas y la producción industrial", asegura el presidente de ZEW, Achim Wambach.



La economía más grande de Europa probablemente se contrajo en el segundo trimestre debido a que el crecimiento global más lento y la incertidumbre de una guerra comercial pesaron sobre la demanda. Desde entonces, las expectativas comerciales se han reducido aún más al nivel más bajo en una década, y las encuestas apuntan a una caída cada vez mayor en la fabricación, afirman en Bloomberg.

El deterioro de las perspectivas de crecimiento, ya que se pronostica que Alemania se expandirá solo un 0,6% este año, ha impulsado las llamadas a un mayor estímulo fiscal. Sin embargo, hasta ahora el Gobierno ha sido reacio. La canciller Angela Merkel "nunca ha dejado lugar a dudas" de que mantiene el objetivo de un presupuesto equilibrado, aseguraba el lunes su portavoz, Steffen Seibert, cuando se le preguntó si la administración estaba considerando emitir nuevas deudas para financiar proyectos ambientales.

Los analistas de ThinkMarkets opinan que los datos del ZEW "confirman que el motor económico de la eurozona tiene serios problemas". "Esto fortalece aún más el argumento de que es hora de estacionar sus activos en un refugio seguro". Mientras, desde Pantheon Macroeconomics aseguran que el descenso es similar al alcanzado durante las crisis financieras en 2008 y 2011. "En esta ocasión, sin embargo, parece que los inversores se están anticipando el caos".

"El persistente deterioro en el sentimiento, combinado con los bajos niveles de inflación, desencadenará una respuesta política por parte del Banco Central Europeo (BCE), que debería anunciarse en la reunión de septiembre", creen en Oxford Economics.