Arcelor cae a plomo tras el nuevo revés de la guerra comercial

Desde un punto de vista técnico, su cabeza y hombros sigue intacto.
ArcelorMittal cae con fuerza (-5%) una jornada después de presentar resultados trimestrales. La acerera cotizada en el Ibex 35 reconoció pérdidas de 447 millones respecto a los 1.865 millones de beneficios registrados un año antes. Una cifra que incluye 900 millones por deterioro de activos y, se debe en buena parte, a los precios del acero y los altos costes de las materias primas... y a China tras los nuevos aranceles de Trump al gigante asiático.
La compañía reconoció este impacto negativo en unas cuentas en las que evita referirse a dicha guerra comercial como causante de sus quebraderos de cabeza.

Las ventas del trimestre alcanzaron los 19.279 millones, ligeramente inferiores a los 19.998 millones del segundo trimestre de 2018. En el semestre, las ventas cayeron hasta los 38.467 millones desde los 39.184 millones del primer semestre de 2018.

En el segundo trimestre, el EBITDA fue de 1.555 millones frente a los 3.073 millones del segundo trimestre de 2018. En el primer semestre, el EBITDA quedó en 3.207 millones frente a los 5.585 millones del mismo periodo de 2018.

Desde un punto de vista técnico, el analista de 'Bolsamanía' J.M. Rodríguez destaca que "el gran cabeza y hombros semanal sigue intacto". Dicho esto, "las zonas de control se encuentran en los 12,78 euros por abajo y los 16,49 por arriba".

A su vez, los analistas de Bankinter reconocen que "sus resultados muestran la continua presión sobre sus márgenes" y recuerdan que "en mayo Arcelor anunció dos recortes temporales de producción en Europa" debido a los citados problemas con el coste del acero y otras materias primas. A esto, se suma "la débil demanda en el Viejo Continente y un mayor número de importaciones en el sur del continente".

En Banco Sabadell subrayan que los resultados de Arcelor estaban en línea con lo esperado pese a esa rebaja de las perspectivas de demanda global. Además, añaden que "los resultados en sí no serán un catalizador porque mantienen la reducida visibilidad por la que pasa el sector".