Si tienes hijos pequeños, seguro que muchas veces te has preguntado cuándo pasar de la hucha a la primera cuenta bancaria. No hay una respuesta única, porque no es necesario esperar a que el menor alcance la mayoría legal, y es bueno que desde pequeños se familiaricen con el mundo de las finanzas y la importancia del ahorro, pero el momento lo decides tú.
La mayoría de las entidades de crédito comercializa libretas de ahorro, cuentas bancarias y otros productos diseñados especialmente para niños y jóvenes. Muchas ofrecen incentivos añadidos como actividades, sorteos y regalos, como videojuegos. Se trata de la primera puerta de entrada de los más pequeños al mundo de las finanzas personales y sirven para que los niños empiecen a gestionar sus ahorros y a entender cómo funcionan el dinero y los bancos.
Requisitos para abrir una cuenta para niños
Como es habitual en estos casos, el titular suele ser menor de edad por lo que es necesario que cuente con un representante legal: los progenitores (se requiere aportar libro de familia) o el tutor legal que ejerza la patria potestad asignado por sentencia judicial.
Para la apertura de una cuenta infantil es imprescindible que el menor tenga DNI (en este enlace tienes la información para sacarte el primer DNI) o, en su defecto, que cuente con un NIF provisional que proporcione la Agencia Tributaria (aquí podrás informarte del modelo 030). Este último no tiene coste a la hora de solicitarlo pero si contratas muchos productos tendrás que cambiarlas cuando tengas el definitivo.
Productos de ahorro para niños
Libreras o cuentas de ahorro
Desde Finanzas para todos tienen una sección dedicada a la primera cuenta bancaria, donde explican que las libretas de ahorro infantiles se caracterizan normalmente por:
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Liquidez total. Es decir, uno puede ingresar y retirar dinero libremente.
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Ausencia de gastos y comisiones.
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Remuneración baja: el tipo de interés que abonan es muy pequeño.
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Los titulares pueden ser desde recién nacidos hasta una edad límite en torno a los 25 años.
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No se pueden domiciliar pagos, porque es un producto de ahorro.
Las operaciones que realiza el titular menor de edad tendrán que ir respaldadas con la firma del tutor.
Algunas entidades ofrecen otros modelos de cartilla que, según la edad, se asemejan más a cuentas corrientes, con algunas domiciliaciones y la entrega de tarjetas de débito o prepago para jóvenes.
Metas de ahorro
son como las huchas del siglo XXI. Un servicio que pretende fomentar el ahorro infantil y juvenil de forma fácil. Por ejemplo, la Metas Junior de COINC, una cuenta gratuita, que no te cobra comisiones ni tienes período de permanencia y, encima, tus ahorros disfrutan de una pequeña remuneración (0,20% TAE).
Consejos antes de abrir una cuenta bancaria para niños
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Compara entre todas las cuentas bancarias para niños que existen y elige aquella con la que te sientas más cómodo.
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Como con todo producto financiero, por sencillo que sea, es importante que leas bien las condiciones.
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Involucra a tu hijo o hija: es mejor que el proceso de apertura de la cuenta bancaria la hagáis juntos, así se sentirá protagonista de esta nueva etapa.
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Si la cuenta es para el menor, no debe utilizarse para asuntos propios del representante legal.
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Si tu hijo tiene 14 años o más, te recomendamos pensar directamente en una cuenta juvenil porque ofrece más posibilidades.
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